Cuando un lunar se vuelve cáncer

Cada año aumentan los nuevos casos de personas con cáncer de piel. Esto es causado principalmente por el aumento en
la intensidad de los rayos solares y la alta exposición que tenemos a ellos. Claro está que la herencia en los genes es un factor muy importante. Es común que tengamos los famosos lunares “de nacimiento" y que la mayoría dice... “seguro es
benigno, porque toda la familia lo tiene”. Sin embargo, cualquier lunar se puede convertir en un terrible cáncer de piel. ¿Cómo sospechar de un lunar maligno? Muy sencillo, la mayoría de los lunares tiene características muy similares. Un color uniforme en tono marrón o café, son óvalos o círculos bien delimitados, son menores de 6mm. Son planos y no dan ningún tipo de síntomas. Pues bien, si éstas son las características de un lunar benigno, cualquier cosa que salga de esto puede ser un dato de ¡sospecha! Es decir... Si un lunar tiene colores diferentes (normalmente mezcla de colores claros y obscuros) si sus bordes son irregulares (no círculos u óvalos bien formados) si su tamaño (diámetro) es mayor a 6mm. son realzados o dan algún tipo de síntomas o signos (como sangrado, descamación, dolor, o bien un crecimiento rápido)... ¡¡Cuidado!! Podemos estar ante la sospecha de un lunar maligno, o que se puede llegar a volver maligno con el paso del tiempo. Mientras más datos de éstos tenga un lunar, más altas las posibilidades de que un lunar se convierta en un tumor de piel canceroso.

14 de Febrero de 2013